Educación ambiental para niños: tres recursos didácticos para cuidar el planeta
¿Por qué es clave la educación ambiental? Cada día la preocupación por la conservación del medio ambiente y su cuidado es mayor en nuestra sociedad, y es muy necesario que sigamos tomando medidas para ayudar a que esta situación mejore, ya que, todo los actos que ha hecho la población en el pasado ha repercutido en el medio natural de hoy en día provocando grandes impactos negativos en el planeta, como es el cambio climático.
Por lo que, es algo fundamental, educar desde pequeños a los niños, haciéndoles llegar información para el cuidado del medio ambiente y enseñándoles lo importante que es cuidar la naturaleza, promoviendo acciones como el reciclaje, además de enseñándoles a querer a todos los seres vivos y los recursos naturales que nos ofrece el planeta.
Cuando estos valores tan importantes comienzan a inculcarse a los niños desde una edad temprana, será muy fácil que lo vayan incorporando poco a poco en sus acciones diarias y así se generará en ellos una forma de vivir sostenible y respetuosa con el medio que les rodea.
Este planteamiento marcará una relevante diferencia en el futuro que les espera a nuestro planeta y será positiva.
3 actividades para la educación ambiental
Para ello hemos propuesto tres actividades, a través de las cuales los niños podrán contribuir a cuidar el medio ambiente.
La primera de ellas es la excursión, sin duda alguna, es la que más suele gustar a los pequeños y de la que pueden aprender una gran cantidad de cosas nuevas, como por ejemplo, sobre la naturaleza.
En la excursión podrán ir anotando los diferentes elementos que van observando, como por ejemplo una planta, una roca, un animal que les haya llamado la atención y también podrán plantearse qué cosas no pertenecen a ese medio, como, la basura, para que de esta forma analicen los resultados que han obtenido de la observación.
En ella se puede incluir una actividad dedicada al reciclaje de la basura que vayan encontrando y por tanto, a la recogida de la misma. Así el niño aprenderá y fomentará el uso de esta práctica.
Otra opción que se puede llevar a cabo, son los juguetes con material reciclado, debido a que se ha producido un consumo masivo a lo largo de estos años, lo que ha provocado un gran impacto negativo para el planeta y por tanto, para el ecosistema. De esta manera, se realiza un consumo responsable. Además, en esta actividad se puede realizar también un taller en el que los niños puedan construir sus propios juguetes, utilizando material reciclado.
En tercer lugar, para poder incentivar a que los niños sientan amor por el medio ambiente desde que son pequeños, se pueden realizar talleres de jardinería, en los cuales, los pequeños podrán aprender el proceso de crecimiento de las plantas.
Se puede realizar con una lenteja por ejemplo, que comenzará a crecer, hasta convertirse en una pequeña planta.
¡Apostemos por la educación ambiental!